Este emprendimiento nacido como un sueño familiar en pandemia y casi destruido por una avalancha, hoy resurge. Gracias al apoyo del Fondo Emprender del SENA, el proyecto se ha reactivado y crece en el corregimiento de La Laguna. Una historia desarrollo local.
Gracias al Fondo Emprender y al acompañamiento de la Ruta de Emprendimiento del SENA, emprendedores de la región han fortalecido y reactivado sus negocios tras superar grandes desafíos. Entre ellos está “Mi Finca Restaurante Campestre”, liderado por Diana Botina, ingeniera informática que dejó la docencia para impulsar este proyecto turístico y gastronómico familiar desde hace cinco años.
“El apoyo del SENA ha sido fundamental. Recibimos orientación en ideación, validación y formulación del plan de negocios, además de acompañamiento en la postulación a la convocatoria. Obtuvimos recursos de capital semilla y, en la fase de puesta en marcha, también recibimos asesoría para la correcta ejecución de los recursos”, explicó Diana Botina, emprendedora del restaurante Mi Finca
El emprendimiento nació durante la pandemia con el propósito de reactivar la economía familiar, mejorar la calidad de vida e impulsar el turismo en la vereda Aguapamba ubicado en el corregimiento de la Laguna a 20 minutos de Pasto. Sin embargo, en marzo de 2025, una avalancha destruyó más de la mitad de la infraestructura del restaurante, representando uno de los mayores retos para su operación.
“Fue el momento más difícil como emprendedores y como familia, prácticamente perdimos años de inversión. Pero gracias al Fondo Emprender retomamos fuerza para continuar. Si no hubiéramos contado con ese apoyo, habríamos cerrado”, puntualizo Diana Botina.
A pesar de la emergencia, el restaurante ha logrado reconstruirse y consolidarse nuevamente como un punto de encuentro para la comunidad y visitantes, ofreciendo zonas verdes, salón de eventos, parqueadero y canchas deportivas, además de un menú tradicional con productos cultivaos en la región.
“Desde el Fondo Emprender se apoyó este proyecto con orientaciones y entrenamientos en ideación, validación y formulación del plan de negocios. Luego, un orientador acompañó la asesoría y postulación a la convocatoria. Con el capital semilla, el emprendimiento realizó adecuaciones, adquirió equipos, muebles y cubrió nómina, logrando poner en marcha su operación”, afirmó Diana Fuertes, líder regional de emprendimiento del SENA Nariño.
Hoy en día, el emprendimiento ofrece platos típicos como cuy, frito pastuso, mazamorra con queso, miel con cuajada y otras preparaciones que resaltan la gastronomía rural. El restaurante se caracteriza por comida fresca y natural, además de la posibilidad de preparar platos personalizados según las solicitudes de los clientes.
El SENA invita a los emprendedores del departamento de Nariño a vincularse a la Ruta de Emprendimiento y conocer las oportunidades de formación, asesoría y financiación disponibles a través del Fondo Emprender.
OFICINA DE COMUNICACIONES SENA REGIONAL NARIÑO